Los llamados “Vampiros eléctricos” son aquellos aparatos del hogar y de la empresa que, aún apagados, pero no desconectados, siguen consumiendo energía y por tanto siguen contribuyendo a aumentar nuestra factura de la luz y que en consecuencia afectan negativamente al medio ambiente a través del aumento de emisiones de CO2, causantes del cambio climático.
Este consumo oculto es debido al sistema denominado “Stand by“, que sirve al electrodoméstico para encenderse más deprisa, detectar mandos a distancia o realizar órdenes programadas con antelación. En otras ocasiones, los aparatos consumen en silencio porque vienen provistos de luces, relojes o paneles digitales informativos que están activados constantemente y por lo tanto, necesitan electricidad.
Aunque podamos pensar que este tipo de consumo es insignificante, la suma de varios de estos “vampiros” puede suponernos a lo largo del año un importante gasto. Dependiendo de la cantidad de equipos de tu hogar (¡u oficina!) el recibo puede incrementarse de un 5 a un 20 por ciento.
El consumo del “Stand by” es responsable aproximadamente del 1% de las emisiones globales de CO2.
En la página web de la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) existe una calculadora para identificar cuánto consumen tus aparatos eléctricos cuando se encuentran en el modo de “Stand by“. La calculadora muestra el consumo en euros, potencia y kilos de CO2 emitidos anualmente por los aparatos de tu vivienda u oficina. También podrás obtener con esta herramienta la cifra total del ahorro que conseguiría apagando totalmente estos elementos electicos. Existen soluciones para evitar este consumo eléctrico oculto pero la principal es concienciarse de su existencia y aplicar el sentido común. En el caso de aparatos recargables se recomienda retirarlos cuando estén cargados. En el caso del PC, si no vas a utilizarlo en un tiempo, puedes activar el modo de hibernación: consumirá menos, pero continúa consumiendo, también podemos apagar el monitor del ordenador.
Como consumidores también podemos influir en los fabricantes de estos productos mediante la preferencia de la compra a los aparatos que no lleven sistema “Stand by” o (si no es posible) que cuenten con una eficiencia energética lo más alta posible. La industria irá tomando buena nota y cada vez lanzará productos más eficientes y más respetuosos con el medio ambiente.
¿Y tú?, ¿tienes vampiros eléctricos en tu casa o empresa?, ¿qué esperas para combatirlos?